TOPONIMIA DE LA AZOHÍA Y EL CAMPO DE CARTAGENA (IX), por Ginés Mota
(pasar a parte I) (pasar a parte II) (pasar a parte III) (pasar a parte IV) (pasar a parte V) (pasar a parte VI) (pasar a parte VII) (pasar a parte VIII)
(continuación)
En 1756, la Cofradía Mayor de Pesca de Cartagena
recibe la visita de lo que hoy serían unos inspectores de hacienda, -los responsables de las Rentas
Nacionales-, que en ocasiones intentaron intervenir las cuentas de esas
pesqueras sin éxito.
El
documento dice así:
“…Informada esta Ciudad por el Sr. D. Alonso Espexo, su
capitular y Abogado, del encargo que se le hizo en Cavildo de 25 de septiembre
de este año, sobre la instancia deducida por D. Manuel de la Riva, Comisario de
Matricula de esta plaza, en el asunto de la almadrava de Escombreras, y en
inteligencia cierta en que está esta Ciudad de tener el Sr. D. Francisco
Barrero, Intendente General del Departamento de Marina de este Puerto, copia
del Real Privilegio en que a esta referida Ciudad y a sus vecinos por el Santo
y Sr. Rey D. Fernando el tercero en fecha de 16 de enero de 1280, se le hizo
gracia entre otras cosas de los mares, montes y pesquerias. Acuerda, se
responda por los mismos Caballeros Comisarios que lo hicieron el antecedente al
Sr. Alcalde Mayor por mano de quien se hizo la instancia de dicho D. Manuel de
la Riba, que en fuerza de el ha estado esta Ciudad en inmemorial posesion de
todas las pesquerias de su jurisdizion, arrendándolas como la de Cabo de Palos
y Salitrona cuando se calaban, habiendo tenido por uno de sus propios como hoy
tiene, la Pesca de la Asuhia en los 3 meses de Abril, Mayo y Junio, sin que se
sepa porque se introdujo la compañia de Pesquera que se llama Mayor, a calar la
Almadraba de Escombreras en los dichos tres meses de Abril, mayo y Junio,
entregando a esta Ciudad la mitad del pescado grueso que se mata en ella,
abonando esta Ciudad a la dicha compañia 2 Reales y 7 maravedis de Vellón por cada
arrova, repartiendo a sus vecinos la dicha mitad del pescado al mismo precio…”
Por
aquella época la almadraba de La Azohía se calaba durante los meses de abril,
mayo y junio, y junto a esa actividad, acudían a sus inmediaciones numerosos
pescadores de toda la costa oriental de Mazarrón. Otras importantes almadrabas
se instalaban entre Cabo Cope y Calabardina, y en San Juan de Terreros, a las
que acudían los pescadores de esas costas.
En
La Azohía, tanto para el transporte del pescado como de las personas se
recurría a pequeñas embarcaciones que tenían su base en el barrio de Santa
Lucía de Cartagena, por ser este medio el más rápido.
Esa
antigua arte de pesca suponía la presencia tanto de los propios profesionales
como de sus familias. Durante los tres meses mencionados, la actividad era
frenética por lo que se precisaba de cocineros, carpinteros, trajineros, y por
supuesto sacerdotes para los servicios religiosos, quienes, a falta de ermita,
decían misa en algún almacén o al aire libre.
En
otro documento se ponen de manifiesto las condiciones de vida y del trabajo en
la almadraba de La Azohía:
“…Viose en este
Ayuntamiento un memorial de Ygnacio Garzia y Sebastian Minguez, armadores y
apoderados del Gremio y Compañia mayor del Pesquera desta Ciudad, en que dizen
hallarse dhº Gremio con la nobedad de que las varcas que se destinan a la
Pesquera de la Asohia se retiran los sabados en la tarde a esta Ciudad, no
pudiendo hazer la pesca del Domingo, estimulandoles a ello el prezepto de oyr
misa de que carezen en dhº sitio. Por lo que, haviendose acordado dhª Compañia
con el Rdº Pe Guardian del Combento de Sn Diego de la Villa de Mazarron en que
embiase un relijioso para la celebrazion de misa, no tubo efecto respecto a que
el fiel de dhª pesca, de su autoridad propia y sin facultad alguna, dispuso
fuere un relixioso del Convento de Sn Francº desta Ciudad (Cartagena), quien lo
executo por 3 o 4 dias. Y haviendose recurrido a dhº Convento de Mazarron no
bino sacerdote alguno a causa del antezedente motibo. Lo que dhª Compañia mayor
haze presente a esta Ciudad para que quede zerziorada del justo motibo que les
ha movido en la retirada de dhªs varcas; con lo demas que dhº memorial
contiene, suplicando a esta Ciudad se digne suspender qualquiera providenzia en
el asumpto hasta tanto que se enquentra Capellan. Y entendida, Acuerda queda en
Yntelixencia de lo expuesto por dhº Pesquera y satisfecha del motibo que a
ocasionado dhª falta, y que se haga saver al fiel de dhº sitio de la Asohia no
emvaraze al referido gremio en que llebe a él el Capellan que elixiese para
celebrazion de las misas”.
Si
la almadraba es santo y seña secular de este “rincón” qué no decir de su torre
de vigía.
(Continuará)
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