PROTECCIÓN
DE RADIACIONES SOLARES, por F.
Ramos
Este verano, al igual que en ocasiones
anteriores, vamos a volver a insistir en las medidas de protección de
radiaciones UV solares, porque, aunque son muy necesarias por el efecto
beneficioso que desempeñan en la producción de vitamina D, fundamental para los
huesos y el sistema músculo esquelético, también el exceso de radiación es
responsable de la aparición efectos sobre la visión, el sistema inmunitario,
lesiones de piel, y fundamentalmente en la aparición de melanomas y cáncer de
piel, que lamentablemente están aumentando por la costumbre de exponernos en
exceso al sol (amor al moreno) y por la disminución de la capa de ozono que
permite mayor penetración de radiaciones ultravioleta.
Medidas
de protección
●
Limite el tiempo de exposición al sol del mediodía.
●
Busque la sombra.
●
Use ropa protectora, como un sombrero de ala ancha, para proteger los ojos, la
cara y cuello.
● Use gafas de sol con paneles laterales que
representan un 99 al 100 % de protección frente a los rayos UVA y UVB.
● Use y aplique generosamente un protector solar
de amplio espectro (SPF), de factor 30 o mayor, en las áreas de la piel que no
están cubiertas por la ropa. La protección solar se logra mejor mediante la
búsqueda de sombra y con ropa en lugar de aplicar filtros solares. Los
protectores solares no deben usarse para ampliar el tiempo pasado al sol, y la gente
que usa protector solar durante el bronceado voluntario, deben limitar su tiempo
de exposición al sol.
●
Proteja a los bebés y niños pequeños: manténgalos siempre en la sombra.
●
Si eres de piel blanca tienes más riesgo de sufrir quemaduras solares y de
cáncer de piel que las personas de piel oscura, por consiguiente debes de
protegerte con un factor de protección de 30 o mayor.
El
índice UV solar nos indica el riesgo de exposición. Debe usarse protección
solar cuando el índice UV sea 3 o superior.
El índice UV mundial, de menor hasta el mayor. |
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