EL ECO DE LA TORRE
EQUIPO DE REDACCIÓN Y COLABORADORES
Autos AL-MAZARRON Citroën
B. Restaurante Villamares
Café Bar El Ancla
Chiringuito Ferris
Farmacia Martínez García –Isla Plana-
EL ECO DE LA TORRE
(continuación)
ARTÍCULO 18
“Toda persona tiene derecho a
la libertad de expresión de pensamiento, de conciencia y de religión; este
derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la
libertad de manifestar su religión o su creencia individual y colectivamente,
tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la
observancia.”
Este artículo parece concebido desde países democráticos y para países democráticos. Cuando nuestra actual Carta Magna acaba de cumplir 45 años considero que supone uno de los periodos más estables de nuestra historia, a pesar del ruido cotidiano.
Durante más de ocho siglos la Península Ibérica estaba compartida por musulmanes, cristianos y judíos, con intervalos de paz.
Después (S.XVI) se expulsa a los judíos y moriscos, lo que, considerado desde hoy, pudo ser un error.
Desde nuestro Siglo de Oro, (XVI-XVII) la Inquisición llegó a ser una losa para clase intelectual hasta muy entrado el Siglo XIX.
A partir de ahí se desarrolla la Edad de Plata de nuestra cultura, truncada por la Guerra Civil.
Entre 1936 y 1975, para la élite intelectual transcurre un largo y negro periodo en cuanto a libertades se refiere: libertad de expresión, libertad religiosa, libertad política; privación de muchas libertades, especialmente para la mujer; la mujer supeditada al marido, sin capacidad de decisión: para desplazarse, viajar, disponer de dinero en una cuenta, aunque fuera suyo.
Cientos de intelectuales, profesores, escritores, creadores artísticos fueron sacrificados, simplemente por sus ideas; cientos de ellos se exiliaron para salvar su vida.
Ahora los españoles de ambos sexos tienen más libertades que nunca. Los medios de comunicación se han multiplicado con gran libertad.
Ello hace que las personas puedan estar más informadas por gran variedad de profesionales de la prensa y los diferentes medios informativos. Hasta están al acecho de las contradicciones de los líderes más destacados.
Ahora, en una segunda parte, consideremos la ÉTICA y LA ESTÉTICA, la honradez, el respeto y la tolerancia en la información. Yo, muy modesto escritor aficionado, no me siento enemigo de nadie y de modo consciente no dirigiré a nadie expresiones que le puedan ofender.
Me siento profundamente enemigo de la mentira, la falsedad, el cinismo, el falso testimonio, el habla mordaz…; sobre todo si son deliberados y persistentes.
(continuará)
(continuación)
Artículo 32 Matrimonio
1. “El hombre y la mujer tienen derecho a contraer matrimonio con plena
igualdad jurídica.”
Esto que ahora nos parece natural no fue así.
Quienes ahora tienen más de 50 años lo deben recordar. Antes de nuestra Carta
Magna el cabeza de familia, el hombre, era el dueño de la casa para todo; sin
su consentimiento la mujer no podía disponer de su dinero, no podía viajar, no
podía trabajar… recordemos los protagonistas de “Un amor que no mate”… Tú no
vas a trabajar, tú no te separas, tú no vas a ninguna parte, .... ni siquiera a
la de sus padres. Yo creo que la autora, Dulce Chacón, sitúa esta pareja con la
Constitución en vigor, pero viviendo la situación anterior, como si no la
hubiera.
El enunciado de este apartado es muy claro y lo
correcto.
Sin embargo, me permito hacer algunas cuestiones
y observaciones previas, consciente de que afortunadamente no afectan a la
mayoría de los jóvenes de ambos sexos o del mismo.
Pero entonces no se contemplaba lo que ha venido
después, más aprisa de lo que se suponía:
El matrimonio religioso, sacramental.
El enlace matrimonial legal, civil ante un juez,
un alcalde.
El enlace legal de una pareja del mismo sexo,
hombres o mujeres.
La pareja de hecho estable.
Todas ellas son legales en nuestro país, con
derechos legales y amparo del Estado.
El actual Pontífice extiende a todos ellos,
aunque de diferente manera la bendición de Dios. Todos son personas, todos
seres humanos, todos hijos de Dios. Y sólo el Creador, que conoce el interior
de las personas, tiene la potestad de juzgar.
2. “La ley
regulará las formas de matrimonio, la edad y capacidad para contraerlo, los
derechos y deberes de los cónyuges, las causas de separación y disolución y sus
efectos.”
Este apartado abre la solución legal para que los
matrimonios y parejas resuelvan pacíficamente cuando sus diferencias les
parecen insuperables y recurran a ellas sin ir más allá, a las tragedias que
tan a menudo descubrimos en los medios.
Porque no dejo de preguntarme ¿Con qué intención
un hombre, joven o no tan joven, se acerca a una mujer, a veces una
adolescente? ¿a compartir su vida en plan de igualdad con ella o, simplemente
dar salida a su instinto, como sea, en contra de su voluntad, peor que lo que
hacen las bestias?
Cervantes pone en boca de la bella pastora
Marcela su derecho a corresponder o no a las pretensiones del joven
universitario enamorado, sin que la acusen de cruel.
Alguno de nuestros jóvenes de hoy la asesinaría
si no aceptara.
Estoy convencido desde el fondo de mi alma que la
vida de esa mujer, de esa persona, es más importante que todos esos supuestos
delitos y escándalos que diariamente se airean tanto. Sin embargo, ese
asesinato de esa persona se dice en los medios, se olvida,… y su dolor y
sufrimiento queda entre unos vecinos, unos amigos… y para siempre entre sus
familiares más próximos.
(continuará)
La presentación del libro estuvo
a cargo de don José María López Ballesta, del cual también deseo redactar una
pequeña y modesta reseña, aunque no alcance a lo que él se merece.
Don José María López
Ballesta, fundador y director de la Universidad Popular de Mazarrón es
un hombre que se ha hecho a sí mismo; con capacidad creadora, de iniciativas,
mucho empuje y tesón.
En Murcia hizo Bachiller, COU,
Magisterio y Psicología de la Educación.
Asistió a la reunión donde se
constituyó la Federación Estatal de Universidades Populares.
Superada la dificultad de
encontrar un espacio, se empezó a funcionar en el curso 1982-1983. Los talleres
de muy diversa índole iban en aumento, hasta el punto de haber dificultades con
las aulas o espacios.
El que esto escribe, domiciliado
en La Azohía desde el 2000, empezó a asistir pocos años después: a Historia de
Mazarrón, de la mano de Juan Francisco Belmaz y a teatro de la mano de Rafael
del Castillo.
Además de la abundancia de las
actividades y talleres diversos, exposiciones, conferencias… merecen especial
mención: las representaciones teatrales, que cubren todo el mes de mayo, Carlantum,
semana de conferencias, que lleva decenios.
Pero los más sobresalientes e
imponderables, con trascendencia no sólo de más allá de nuestra Región sino
también de nuestro país son:
El “Concurso de Cuentos
Villa de Mazarrón”, en torno al millar de concursantes de la mayoría de
países hispanohablantes.
PHICARIA. Cuando leo
en la pantalla de mi ordenador el programa de la X edición para primeros de
marzo admiro, una vez más, la audacia de José María y su equipo para organizar
eventos de tan alto nivel por la calidad de todos los ponentes.
Ha alcanzado la edad de
jubilación; pero se siente en plenitud y así lo vemos quienes lo conocemos.
El autor, Juan Durán,
nació en Mazarrón en 1951, con lo que supera los 70. Ha tenido una larga vida
pública: empresario, parlamentario regional y portavoz por el PSOE.
Aunque siempre ha aportado
artículos de opinión a la prensa regional, ha sido a partir de los 70 cuando ha
entrado de pleno en el mundo literario:
“Elegía al minero de
Mazarrón”, tan sentido y con tal sensibilidad como si hubiera sido uno
de ellos.
“La libertad de las cenizas”
novela histórica, de profundo realismo sobre la cruda realidad de los Campos de
Concentración nazis, donde fueron 32 los mazarroneros exterminados a los que se
les recuerda con un monumento y sus nombres en Mazarrón.
“Los escuderos de Dios” de diciembre de 2023, si bien es una novela de ficción, los lugares, las situaciones, los hechos que se narran son de gran realismo, a veces crudo realismo: tráfico de personas, de drogas, prostitución, corrupción…
La revolución sandinista, Ifni,
Madrid, la muerte de un comisario, supuestamente a manos de ETA, el espacio de
La Cañada Real hace pensar que sitúa la narración unos decenios atrás.
“El lenguaje utilizado es directo, con descripciones
claras de eventos y personajes, lo que facilita la comprensión de la trama y la
conclusión del misterio.
En definitiva, esta novela
está muy bien construida porque descifra el enigma planteado, resolviendo el
equilibrio y la armonía en la sociedad, proporcionando respuestas a las
preguntas planteadas a lo largo de la trama, y representa una reflexión amplia
sobre la sociedad y la condición humana” (José María López Ballesta).
En esta ocasión don José María se
apartó un poco de sus exposiciones técnicas, estrictas, específicas, planas… En
ésta puso una emoción por encima lo habitual, en sus cambios de tono y
modulación de voz, mostrando su deferencia hacia la persona con la que ha
mantenido una estrecha relación desde niños en la escuela.
Lo que nos ha transmitido un
sincero deseo por leer el libro presentado.
Hace aproximadamente dos meses
que nos empezaron a bombardear desde diferentes frentes anunciando la Navidad.
Varios ayuntamientos entraron en
competición para dilucidar cuál plantaba el árbol de Navidad más alto.
Los grandes almacenes hacían
cualquier cosa para captar la atención del público, y las calles se fueron
iluminando.
Llegó Nochebuena, Navidad, Nochevieja,
los Reyes y tal como llegaron fueron pasando y ya nos encontramos con la rutina
del día a día.
Los niños han vuelto al colegio,
los empleados a sus trabajos y los mayorcitos a ocupar sus sitios en los bancos
de los jardines que nunca habían dejado.
De nuevo estábamos ante la
llamada cuesta de enero que a algunos les costará ascender; como siempre, a
unos bastante más que a otros.
Hace tiempo que pienso que la Navidad
es para los niños, los jóvenes, para los padres que tienen hijos pequeños y
para los abuelos.
Los niños disfrutan de las
vacaciones escolares y reciben infinidad de regalos, aunque también a algunos
mucho más que a otros; los jóvenes que siempre se suelen divertir, ahora se
divierten aún más, los padres vuelven a su rutina y los abuelos a disfrutar de
los nietos y a tomar su solecito.
A los que no estamos en ninguno
de los grupos anteriores solo nos queda vivir la Navidad con los recuerdos.
Personalmente, desde hace largo
tiempo, cuando aún pertenecía al grupo de padres jóvenes con hijos pequeños, no
olvido algo que quisiera recordar aquí.
Serían los últimos años de la
década de los noventa cuando, patrocinado parcialmente por una entidad
bancaria, cada año, durante la semana anterior a la Navidad, se representaban
en el Teatro Romea de Murcia cuentos infantiles de los más populares. Cuentos
clásicos muy conocidos por grandes y pequeños, aquí en España y en buena parte
de Europa.
Teníamos dos hijas que tenían
entonces 5 y 10 años y desde hacía tiempo cada mes íbamos a la capital a un
ortodoncista donde le hacían un tratamiento a la mayor.
Enterado de lo de los cuentos en
el Romea, lo planifiqué todo para aprovechar el viaje e ir toda la familia al
teatro una vez hecha la visita médica. Aquella tarde representaban PINOCHO y lo
harían en dos sesiones, una a las 16'30h y otra a las 18'00h.
Después de comer salimos hacia la
capital, nosotros normalitos y las niñas más arregladas pues la ocasión lo
merecía; irían al Teatro Romea por primera vez.
Vivíamos en una población que
distaba unos 40 km. Bajaron del coche las tres cuando aparqué lo más cerca que
pude del portón donde en uno de sus pisos se encontraba instalada la clínica
dental y seguí, primero en busca de aparcamiento y, a continuación, provisto de
un folleto informativo donde venía el horario de las funciones y con el que,
equivocadamente, pensaba tendría reserva de localidades con solo su
presentación; me dirigí hacia la plaza del Romea. A medida que me iba acercando
notaba como crecía en mí la emoción.
Pero muy pronto todo se vino
abajo cuando, ya a los pies del teatro leo sobre el anuncio principal del
evento: "Agotadas las localidades para todas las representaciones."
Se me cayó el mundo encima, me
vine totalmente abajo; ni teatro, ni cuento, ni pinocho ni nada. A pesar de lo
claro que dejaba el tema lo que ponía en el anuncio y que mi moral estaba por
los suelos, no sé por qué, no di la vuelta y me fui.
Entré en el teatro y pasé a un
sala situada a la izquierda. Tenía las paredes decoradas con imágenes de obras
que supuestamente habían sido representadas anteriormente y por otras que serían
representadas próximamente.
Por inercia pasé a echarles un
vistazo.
Sólo habían pasado dos o tres
minutos cuando alguien se me acercó y me preguntó que si me podía ayudar en
algo. Muy sorprendido, me di la vuelta y vi a unos pocos metros de mí a un
señor que rondaría los cincuenta o cincuenta y cinco años que vestía de una
manera normal, se podía decir que sencilla, que no manifestaba nada especial y
que yo no había visto nunca.
Cuando reaccioné, traté de
contarle resumidamente cuál era el motivo por el que estaba allí. Ante mi
creciente asombro, directamente, me preguntó que a qué representación teníamos
pensado asistir. Siguiendo aún asombrado, le dije que, a la segunda; lo
habíamos decidido así para que la visita al ortodoncista fuera relajada y
pudiéramos ir sin prisas al teatro.
Me dijo que a las 17'45h.
preguntara por él en el lugar de acceso del público. Lógicamente, le pregunté
que quien era y ante mi mayor asombro me dijo que era el director del teatro y
me repitió que preguntara por él. Pensando que todo era un sueño, le di las
gracias y salí de aquella estancia como el que sale de un lugar perteneciente
al mundo de la fantasía.
Tratando de asimilar lo ocurrido,
de que era real lo que me había pasado; a paso lento y recreándome en lo que me
acababa de pasar mi dirigí hacia la clínica de ortodoncia.
Conté lo ocurrido a la madre de
mis hijas y, como no podía ser de otra manera, se puso a reír estando segura de
que era una broma lo que le estaba contando. Yo se lo repetía, le contaba lo
ocurrido cada vez con más detalles, pero como mi cara mostraba alegría y,
además, como me reía de verla a ella reír, aún se lo creía menos.
Cuando acabó la sesión de
ortodoncia nos fuimos caminando en dirección al teatro, aunque alguien seguía
teniendo algunas dudas. Llegamos unos minutos antes, esperamos y, justo a la
hora acordada nos pusimos en la cola. Cuando nos tocó entregar la entrada que
no llevábamos, le dije al portero que había quedado con el director. No pasaron
ni dos minutos cuando apareció el señor con el que había hablado un par de
horas antes acompañado por un ujier; me saludó y le dijo a su acompañante que
acompañara a la familia a un palco concreto del primer piso. Se despidió de
nosotros y, dirigiéndose especialmente a las niñas nos deseó que disfrutáramos
de la obra. Seguimos a nuestro guía hasta el palco indicado donde nos acomodó
despidiéndose a continuación muy educadamente.
Muy cómodamente, con cierto
"aire de grandeza" y después de echar un vistazo panorámico al
conjunto de las instalaciones, disfrutamos de la representación del famoso
cuento.
Con la moral por todo lo alto y
con el objetivo cumplido con creces, nos dimos un paseo por el centro de la
ciudad y nos comimos uno de los famosos pasteles de carne.
Aquella experiencia no se me
olvidará nunca y, cuando la recuerdo confirmo que, aunque pocas, a veces, en
Navidad pasan cosas muy hermosas.
No quiero acabar sin decir que,
después de alguna indagación, porque entonces no había Internet, el director
del teatro y gran protagonista de esta historia fue el señor Lorenzo Peris a
quien recuerdo con mucho cariño y admiración, esté donde esté.
El último semestre del 2023 la Unión Europea se benefició de
la sabiduría y el buen hacer de una presidencia española. Ésta no llegó de
forma improvisada, sino con un cuaderno de ruta estudiado para reconvertir a la
deslavazada Unión en gran potencia.
REINDUSTRIALIZAR EUROPA Y RECUPERAR SU AUTONOMÍA Y
POTENCIA ESTRATÉGICA
En 1975, cuando se empezó a tomar
en serio nuestra llamada a las puertas de la Comunidad Económica Europea, la
industria española hubiera supuesto el 36% de la total de los diez países
miembros, pues ocupábamos el octavo del ranking mundial. Cierto que no fuimos
el 10º miembro, pues que preguntaran “¿quién llama?” no significó que nos
abrieran en aquel momento. Aún tuvimos que esperar diez años y en el intervalo
se nos coló Grecia. Durante el socialismo modernizador y europeísta de los años
80, un conocido ministro llamado Solchaga se dejó decir “la mejor política
industrial es la que no existe”. Con un socialismo actual tan alejado de aquél,
parece que en algo siguen coincidiendo. Y eso que Maastricht (1992) tuvo en
agenda la necesidad de desarrollar un marco que creara condiciones para el
crecimiento industrial moderno. Una vez que dije esto en público, un amable
oyente me preguntó quién es Maastricht. Así que no sigan por ahí.
Hoy nuestra posición entre los
países industrializados del mundo debe andar por el 23º. Nuestro peso dentro de
la Unión es el 14%. Desde aquel 1975 la fiscalidad se ha multiplicado por 5 y
el porcentaje de paro (hoy cifra-burqa, decente y tapadita) por
9. Durante los años de la segunda década la Unión estuvo cayendo, salvo
construcción, en todo aquello que no fuera “terciarizar”. Para los que
se consideren incapaces de digerir la palabreja, aclarar que significa
dedicarse a una economía de servicios. Eso mismo hizo Estados Unidos después de
liberar a Cuba del yugo español. La mafia tomó buena cuenta y convirtió la isla
en un inmenso burdel. Vayan tomando nota.
El único país de relieve que
mantiene la Unión dentro de la competencia de la industria mundial es Alemania,
tras China (destacadísimo líder que pronto alcanzará el 30% de la producción),
Estados Unidos, Japón e India. Juntas Italia y Francia (8º y 9º del ranking),
cada una en el entorno del 2% mundial, no alcanzan a Alemania, que se aguanta
en el 5,5% pero no progresa más que los otros de su nivel. Y creciendo más en servicios.
Su economía extractiva, agricultura y pesca, en retroceso. De la minería, mejor
no hablar. Aunque les guste o no, tendrán que ponerse a hablar de la cuenca del
Ruhr.
TRANSICIÓN ECOLÓGICA
¡Ahí sí que nadie nos tose!
¡Somos lo máximo! Debemos estar cerca del 50% en potencia instalada renovable.
Tal vez más del 45%. ¿Saben ustedes las grandes máquinas de última generación
qué energía contienen? Exactamente cero. Turbinas, aerogeneradores, lo que
quieran. Son productores secundarios de energía. La energía primaria, la de verdad,
está en los vientos, en corrientes de agua, en los combustibles fósiles y
nucleares. Esas máquinas lo que hacen es transformarla en electricidad para que
podamos utilizarla. Pero sin la existencia de la primaria, no son más que
pisapapeles gigantes. Cierto que si nuestras turbinas y nuestros
aerogeneradores tuvieran todas las horas de viento y agua que quisieran y como
quisieran, podrían hoy satisfacer toda nuestra demanda de energía sin necesidad
de otras fuentes. Pero no somos ricos en viento ni en agua. Probablemente, esa
energía que su comercializador de último recurso les suministra, procederá de
renovables el 3 ó 4%. Otra vez las cifras-burqa. La parte del león
se la come el gas, con más del 40%, y las nucleares con el 35%. Éstas últimas
con la casi imposibilidad de crecer, por maldecidas y en algunos casos en
trance de obsolescencia. El gas tendrá que seguir creciendo. Y como ya saben,
los señores del gas y del petróleo son un selecto oligopolio mundial ante el
que acabaremos de rodillas. Y con nuestra capacidad para las relaciones
internacionales, parece que los oleoductos no nos llegarán desde la costa
africana, a pesar de que estar a la distancia más corta. De la nuclear verde no
hablamos. Del hidrógeno se habla mucho, aunque creo que sin saber lo que se
dice. También hay mensajes-burqa.
En preescolar de autonomía y
estrategia se enseña que en lo suministros críticos lo más importante es ser
autosuficiente y si no es posible, diversificar las fuentes al máximo. Como se
ve, estamos en el camino.
JUSTICIA SOCIAL
¿Por dónde empezamos? En 2022 los
alimentos nos habían subido 15,3%. Parece que hablar de justicia sin devolver a
la gente su capacidad para la cesta de la compra es una cruel ironía, pero
tranquilícense, que en 2023 “casi” baja la subida anual hasta el 10%. Y se ha
hecho una aportación capital, aunque la obtusa Europa no acabe de entenderlo, y
es la de subir los impuestos. Así se resolverían la mayoría de los problemas. Los
de “ellos”, sin duda alguna.
Y a la juventud, desarmada por
una educación deficiente y sin posibilidades de labrarse su propio futuro, un
subsidio de miseria, ¡viva la vagancia!, y la aportación de papá y mamá hasta
que la muerte los separe. Después va a ser difícil.
REFORZAR LA UNIDAD EUROPEA
No sé bien para qué. Total, en
2030 ya estaremos en el paraíso. Ese camino no se recorre atolondradamente,
está bien señalizado con todos sus hitos. Entre los primeros logros, acabar con
el hambre en mundo. Algún aguafiestas podrá objetar que aumentar el precio de
los alimentos un 27% los últimos dos años apunta a un trastorno de los
navegantes, pero ¿qué camino carece de obstáculos? Y en caso extremo, siempre
queda un plan B: la inanición terminal. Seguro que así el hambre acaba. Otro
hito importantísimo es el de los concursos de belleza: la paz del mundo. ¿Saben
que hay guerras? Y ahí la Unión Europea está dando, ¿cómo no?, enérgicas
respuestas.
Ucrania: En junio de 2022 (4
meses después de la invasión) el Consejo Europeo lo acepta como país candidato.
Noviembre 2023 (presidencia española, etapa final): se recomienda iniciar
negociaciones y en diciembre se aconseja “buscar un marco” para entablar esas
negociaciones. Portazo de salida. El que venga detrás, que arree.
Palestina: La exacerbación es
conocida desde hace largos años: Hamás inicia sus acciones para lograr que, por
exceso de contundencia en su réplica, Israel promueva la indignación del mundo.
Con una situación tan vetusta no vale la pena buscar nuevas soluciones. Lo de
siempre: proceso de paz. Esta vez un tanto pintoresco porque se propone excluir
a Hamás y ¿recuperar? a la autoridad palestina. ¿Se han enterado que la
autoridad palestina es Hamás? Pues va siendo hora, porque la consecuencia
también será la de siempre: miles de inocentes dejarán su vida y su hacienda en
este juego.
Hay mucha más historia detrás de
estas breves citas. Búsquenla, si quieren, donde puedan. Porque los mensajes-burqa
de los medios serviles no darán mucho más. Como no dieron en su día las cifras
de los servicios funerarios de una pandemia que apenas nos iba a afectar. Si
quieren saber algo más del encuentro de Pedro Sánchez con Benjamín Netanyahu o
de su desencuentro con Manfred Weber o de la mesa de negociación sobre
Cataluña, pregunten en Suiza, en El Salvador o dónde diablos se les ocurra.
¿Para qué están los medios serviles? Obviamente, para servir.
“Un mundo feliz” es una
novela escrita por Aldous Huxley y publicada en 1932. A través de su
visión futurista, Huxley nos presenta una sociedad aparentemente perfecta, pero
profundamente perturbadora.
La historia se desarrolla en un
futuro ficticio -transcurre en el año 632 d.F. (después de Ford)- donde la
sociedad -toda la humanidad- ha alcanzado la estabilidad y la felicidad al estar
controlada por el Estado Mundial, y todos los aspectos de la vida están
diseñados para mantener a las personas felices y conformes. La tecnología, la
ingeniería genética y la manipulación psicológica han creado una sociedad
homogénea, dócil y sin conflictos. Sin embargo, esta aparente utopía esconde
una realidad sombría.
Aldous Huxley, nos transporta así
a un futuro distópico. (Un futuro distópico es aquel en el que la
sociedad o el mundo enfrentan una situación extrema de desorden, precariedad o
crisis. A diferencia de la utopía, que representa un estado
idealizado de armonía y libertad, la distopía plantea un
escenario completamente opuesto. En un futuro distópico, las libertades
individuales pueden estar restringidas, la privacidad puede ser inexistente y
los derechos humanos pueden verse amenazados).
Aspectos destacados de la novela:
Control Totalitario:
· El Estado Mundial controla todos los aspectos de
la vida de las personas, desde la concepción hasta la muerte. La gente está
condicionada desde la infancia para aceptar su lugar en la jerarquía social y
no cuestionar el sistema.
· La droga llamada soma mantiene a la población apática, dócil y feliz, proporcionando una escapatoria de cualquier emoción negativa.
Deshumanización:
· La reproducción se realiza en laboratorios,
eliminando la necesidad de relaciones personales y amor.
· Las personas son clasificadas en castas
predefinidas.
· La individualidad y la creatividad están reprimidas en favor de la uniformidad y la estabilidad.
Crítica a la Búsqueda de la Felicidad:
· La búsqueda obsesiva de la felicidad, a expensas
de la libertad y la autenticidad, ha llevado a la pérdida de la verdadera
experiencia humana.
· La sociedad ha sacrificado la experiencia humana en aras de la comodidad y la satisfacción superficial.
Personajes Memorables:
·
Bernard Marx, un disidente que lucha
contra el sistema y cuestiona la conformidad.
· John el Salvaje, un hombre criado fuera de la sociedad tecnológica, cuya llegada a la civilización desencadena una serie de eventos impactantes.
Crítica Social y Filosofía Profunda:
· Huxley cuestiona la búsqueda incesante de la
felicidad. ¿Es la felicidad superficial realmente deseable?
· La novela nos insta a reflexionar sobre nuestra
propia sociedad y nuestras elecciones individuales. ¿Estamos dispuestos a
sacrificar nuestra humanidad por la comodidad?
Aunque la sociedad que presenta parece perfecta superficialmente, su análisis crítico revela una realidad sombría y perturbadora.
Una de las principales críticas que se pueden hacer a "Un mundo feliz" es su falta de profundidad en el desarrollo de los personajes. A lo largo de la novela, los personajes parecen ser meros estereotipos sin ninguna complejidad emocional. No hay una verdadera exploración de sus motivaciones o conflictos internos, lo que hace difícil para el lector conectar con ellos y empatizar con sus experiencias.
Además, la trama de la novela carece de tensión y emoción. A pesar de que se plantean temas interesantes como el control gubernamental, la manipulación genética y la pérdida de individualidad, estos no son suficientemente explorados ni desarrollados. La narrativa se siente plana y predecible, sin giros sorprendentes o momentos impactantes que mantengan al lector enganchado.
Otro aspecto problemático de "Un mundo feliz" es su visión simplista y pesimista de la humanidad. Huxley retrata a los seres humanos como seres pasivos y conformistas, incapaces de buscar algo más allá del placer inmediato. Esta visión reduccionista ignora por completo la capacidad humana para el crecimiento personal, el cambio y la búsqueda del significado en la vida. Además, presenta una visión negativa de la tecnología y la ciencia, sin considerar los avances positivos que pueden aportar a la sociedad.
Por último, el estilo de escritura de Huxley en "Un mundo feliz" es frío y distante. La prosa carece de emoción y belleza, lo que dificulta aún más la conexión emocional con los personajes y la historia. Además, el uso excesivo de jerga científica y términos técnicos puede resultar confuso y alienante para algunos lectores, lo que dificulta aún más la inmersión en la historia.
No obstante, “Un mundo feliz” es una advertencia sobre los peligros de la conformidad ciega y la pérdida de nuestra humanidad en busca de la felicidad. Aunque la sociedad descrita puede parecer atractiva en algunos aspectos, Huxley nos recuerda que la verdadera libertad y la autenticidad son esenciales para la experiencia humana. Su prosa es incisiva y provocadora, y su visión sigue siendo relevante en la actualidad.
Las distopías no solo entretienen, sino que también nos hacen reflexionar sobre los peligros de ciertos caminos y nos instan a proteger nuestras libertades y valores fundamentales. Aunque estas visiones pueden parecer extremas, a veces nos recuerdan que debemos esforzarnos por evitar que nuestro mundo se convierta en una pesadilla distópica.
Al resumir sus aspectos
positivos, “Un mundo feliz” es considerada una obra maestra
literaria que nos insta a reflexionar sobre nuestra propia sociedad y
nuestras elecciones individuales. A pesar de su oscuridad, es una lectura
esencial para aquellos interesados en la ciencia ficción, la filosofía social y
la exploración de lo que significa ser verdaderamente humano.
“Huxley pretende ofrecer una advertencia sobre las indeseables y funestas consecuencias que un uso descontrolado de los avances científicos y tecnológicos pueden causar en el ser humano, cuando, además, estos avances son el principio, sobre el que se cimenta un sistema político cuyo principal interés es perpetuarse a cualquier precio”.
Ahora mismo en estas fechas, en estos años, percibimos cómo grandes mandatarios del mundo, Putin desde 2007, Xi Jinping desde 2013, sin olvidar al clan hereditario de Corea del Norte, al margen del sentido democrático más elemental, hacen uso de todos los medios para perpetuarse en el poder de manera absolutista. De momento, tenemos el consuelo de que ese poder absoluto es sólo sobre una parte del mundo, aunque ésta no deje de ser muy importante.
“Hasta que al final la mente del niño se transforma en estas sugestiones, y la suma de estas sugestiones es la mente del niño. Y no sólo la mente del niño, sino también la del adulto a lo largo de toda su vida. La mente que juzga, que desea, que decide… formada por estas sugestiones. ¡Y todas estas sugestiones son nuestras sugestiones!... ¡Sugestiones del Estado! ¡El Estado Mundial!”
Por eso Linda, que estaba condicionada, sólo sabía trabajar con esos bebés, era en Malpaís una inútil para cualquier otra labor. Por lo mismo, consideraba normal tener sexo con hombres distintos. Su hijo John, en cambio, criado entre los indios, con una moral estricta, medio cristiana e indígena, odia al indio Pope por sus relaciones con su madre a la que le suministra la droga. En cambio, recibe del indio Mitsima labores artesanas como la cerámica y la caza, que practicará cuando se refugia en el Faro. Se enamora románticamente de Lenina, la belleza de la novela, al estilo de Romeo y Julieta. No asume que ella desee, sin preámbulos, acostarse con él. Rechaza ese mundo civilizado. Se siente un objeto y se suicida.
La larga conversación entre Mustapha Mond y John es muy ilustrativa. Él, que guarda una biblioteca selectiva y oculta, vive entregado a la felicidad de ese mundo civilizado bajo el eslogan de “Comunidad, identidad, estabilidad” en el Estado Mundial de un gobierno global que controla, económica y políticamente a toda la población.
De la misma manera que Ford fabrica miles de coches idénticos en serie, en el Centro de Incubación se generan series de 80 seres humanos idénticos, que en el Centro de Decantación, mediante una metódica sugestión, cientos de miles de veces, se les programa para toda su vida. Así serán clasificados según el alfabeto griego Alfa, Beta, Gama, Delta, Ypsilón.
Todo está preparado para el consumo: menospreciando el campo y la naturaleza, deportes con aparatos, transporte en trenes, helicópteros, aviones, evitando la individualidad, muchas horas de ocio que llegan a hastiar y prefieren alargar la reducida jornada. Los arreglos de ropa, calzado… son pobreza. Ese eslogan se repite continuamente.
Si esa sociedad es radicalmente clasista, es también racista. Al menos los Delta e Ypsilón no son blancos; no falta el rasgo machista; la mujer más destacada es Beta plus.
Los dirigentes son todos Alfa plus: Mustapha Mond, el Controlador; Helmholtz Watson el más cerebral que escribe los guiones senso film pero le gustaría escribir otras cosas; su amigo Bernard Marx, que tiene memorizados los programas de Decantación, pero vive acomplejado porque su físico no acompaña a su inteligencia; Benito Hower, el más tranquilo, seguro y feliz, muy deseado por las chicas; Henry Foster, pareja de Lenina.
Helmholtz y Bernard se despiden amigablemente de John para ir a disfrutar un poco de soledad en Las Malvinas.
En resumen, uno puede decir que
el grado de desnaturalización y deshumanización para elevar al máximo grado lo
artificial en ese mundo que nos presenta va mucho más allá de todo lo
imaginable. Y si ese fue su objetivo lo ha conseguido con creces.
Amnistía Internacional
es una organización independiente cuyo fin es conseguir que los Derechos
Humanos sean respetados en todo el mundo, como vía para la paz y libertad.
Dentro de su línea de actuación
Amnistía Internacional promueve un año más en la Región de Murcia la acción “Encendido
de Torres y Atalayas”.
Esta acción fue iniciada hace 7
años en Mallorca por un grupo de profesores de instituto en esa isla, entre
ellos un activista de A.I. al tomar en consideración el gran numero allí
existente de torres vigía y atalayas construidas en los siglos XVI y XVII para
vigilar y advertir mediante señales de humo y fuego la arribada a sus costas en
aquella época de piratas berberiscos y de otros orígenes. La fecha de
realización de este encendido está vinculada al aniversario del fallecimiento
de Juan Bautista Binimelis, matemático que ideó en el siglo XVII un sistema de
alarmas mediante señales de fuego y humo.
En los tiempos actuales este
grupo mallorquín pretende revertir el antaño uso de estas torres y atalayas
para, al encenderlas, servir de señales de guía y acogida a los migrantes que
se atreven con riesgo de sus vidas a cruzar el Mediterráneo huyendo de la
guerra y el hambre, en búsqueda de un futuro más seguro en Europa.
Desde 2016 este “Encendido de
torres” se ha ido extendiendo por la costa mediterránea española. Amnistía
Internacional, a nivel estatal, también ha hecho suya la iniciativa, en pro del
derecho humano a la vida, a la seguridad y a desplazarse libremente; tal como
está recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos proclamada
por la ONU en 1948.
Al día de hoy se encienden
cada segundo sábado de enero casi 100 torres, atalayas, incluso campanarios en
todo este área mediterránea. Amnistía Internacional en Murcia se
incorporó a esta acción por primera vez en enero de 2022 (faro romano del
Parque Torres de Cartagena) y siguió en enero de 2023 al pie de la torre vigía
de La Azohía.
Este año A.I. quiere aprovechar
la acción para también reclamar a los responsables europeos un cambio en
las políticas migratorias poniendo en el centro de ellas el cumplimiento de los
Derechos Humanos y estableciendo mecanismos obligatorios de solidaridad
entre los estados para dar una acogida digna y que se implementen rutas legales
y seguras para los migrantes que cruzan el Mediterráneo.
Como anteriormente A. I. Región
de Murcia invita a todos los que respaldan la acogida a los migrantes que
llegan por mar a que acudan el 13 de enero a la torre de Santa Elena de
La Azohía.
Se realizará el encendido de
señales (a las 13 horas botes de humo y a las 18 horas bengalas) con lectura de
un manifiesto expresando la acogida que debe dispensarse a los migrantes que
llegan a nuestras costas.
José Soto Chica, Santa Fe
(Granada) 1971, es Doctor en Historia Universal por la Universidad de Granada.
Fue militar profesional y estuvo destinado en la Misión de Paz de la ONU en
Bosnia Herzegovina. Un accidente con explosivos le dejó sin una pierna y ciego,
lo que le llevó a reconducir su vida hacia la historia, que era lo suyo y de la
que ya nos ha ofrecido los siguientes libros: Imperios y Bárbaros
(2019), Los visigodos, hijos de un dios furioso (2020), El
águila y los cuervos, la caída del Imperio Romano (2021), El dios
que habita la espada (2021), Bajo el fuego y la sal
(2022), Leovigildo, rey de los hispanos (2023).
“Amplió el reino de Hispania hasta límites nunca conocidos, lo enriqueció, redactó leyes que igualaban a godos e hispanorromanos, trajo la prosperidad y la riqueza, pero de vuelta a casa solo encontraba dolor, desprecio y traición.”
Fue autor del Codex Revisus, Código de Leovigildo, “proyecto al que podían sumarse por igual tanto los hispanorromanos como los godos, aunque aún no compartieran la misma fe”.
Su hijo mayor, Hermenegildo, se alzó en armas contra él. Pero Leovigildo no actuó como un señor de la guerra en este caso, sino como un padre traicionado: quedó paralizado por el desconcierto y el dolor. “La corte de Toledo se tornó en el 580 en un lugar frío, afilado, peligroso en el que Gosvinta y Leovigildo se vigilaron, se acecharon, se intimidaron mutuamente.”
Lo derrotó y éste se refugió en una iglesia extramuros de Córdoba. “Abrazado al altar, a grandes voces, gritaba: «Que no venga sobre mí mi padre, pues es una impiedad que un hijo mate a su padre o que un padre dé muerte a sus hijos». Esto exclamaba el que un año antes, en el vado del Betis, en Osset [Sevilla], tramó una celada para cobrarse la cabeza de su padre”. Leovigildo lo perdonó y lo envió al exilio.
“El rey de los hispanos pareció albergar aún en su pétreo corazón una chispa de tenaz y destinada esperanza. Castigaría a su hijo, desde luego: lo privaría del reino y lo humillaría, pero no alzaría su mano contra él”.
Pero también se dio cuenta de que Hermenegildo “era demasiado parecido a él como para que no supusiera un peligro ominoso y constante para su otro hijo menor, Recaredo”. Se vio obligado así a la más desoladora de las situaciones: decidir cuál de los vástagos debía sobrevivir. ¿El que le había sido fiel y sería su heredero, Recaredo, o el que había hecho la guerra buscando cobrarse su sangre con tal de sentarse en el trono o arrebatarle parte del reino? Hermenegildo, definitivamente, constituía un peligro. Debía ser eliminado.
Cuando Leovigildo murió en
el año 586, “dejaba tras él un reino poderoso y ordenado en el que los godos
e hispanorromanos se regían por una misma ley y en el que su voluntad se había
impuesto desde el finis terrae de los ahora sometidos suevos, hasta el río
Ródano de los antiguos galos y desde el mar Cantábrico, hasta la frontera con
la nueva Hispania romana; dominaba toda la Península”. Recaredo,
convertido al catolicismo, le sucedió en el trono hasta 601. Los godos llegaron
a Hispania como arrianos y a partir de él nuestros monarcas siempre fueron
católicos.
Leovigildo y Recaredo |
Recópolis fue una ciudad de nueva planta mandada construir por Leovigildo en el 578 para su hijo Recaredo, en el entorno de lo que es hoy Zorita de los Canes (Guadalajara).
En el yacimiento, en la
actualidad en curso de excavación, se conservan los restos del palacio,
iglesia, puerta monumental, calles, edificios comerciales, casas, muralla,
acueducto, caminos de acceso, todo ello con un Centro de Interpretación,
dispuesto para la visita pública. Parte de los elementos constructivos de la
ciudad, sillares, escultura decorativa, etc., fueron reutilizados en los
edificios de los alrededores en la época andalusí.
Sus ojos no tienen el blanco de
los blancos.
Su rostro es más oscuro.
Se acuclilla junto a una baranda
del barco de salvamento.
Hace unos instantes ha logrado
bajar de su cayuco.
No le sostenían las piernas.
Huele mucho. Todo le duele.
Encima solo lleva el peso de su
vida.
Una capucha ajada ha sido su
protección contra el agua, el sol, el salitre y la lluvia durante la travesía.
Llega a una Europa casi austral.
Canarias tienen mucho de África.
Allí recalan, y no solo por su cercanía a ese continente que puede significar
“Tierra sin frío”, no pocas embarcaciones de migrantes.
Cada llegada es el fin de una
epopeya, pero el comienzo ¿de qué?
Esa mirada lo resume todo.
Aun a salvo, todavía prevalece
este infinito vacío.
Una manta roja pronto cubrirá sus
hombros.
Pero los ojos seguirán ofreciendo
esa poca luz, incierta, inquieta, a un rostro demacrado.
A su alrededor más de lo mismo,
aunque otros bajan la cabeza pues prefieren no ofrecer esa imagen desvalida.
Los engranajes de la rueda
dentada, de la maquinaria de acogida o devolución, empiezan a funcionar.
Cuatro días para la Navidad.
En otra época, ese mismo día,
Otro Emigrante viajó hacia lo que era la Tierra, acaso también sin frío, de sus
ancestros.
Para algunos, de allí surgirá
algo que pueda colmar ese absoluto vacío, la nada integral, el desvalimiento
del hombre.
Habrá Redención, pero esos ojos
dudan.