ECO.59 LA GUERRA CONTRA EL COVID19

La guerra contra el covid19, por Francisco Ramos

Hoy, 7 de marzo, nos encontramos inmersos en pleno proceso de lucha contra esta pandemia "covid-19", aunque hay otras que llevan más tiempo asolándonos y que dosis a dosis, casi por compromiso ético, vamos combatiendo, como el hambre o el cambio climático; pero centrándonos en el tema que nos inunda los sentidos todos los días, digamos que estamos viviendo un relato de la realidad que lo podemos resumir en 3 componentes: el enemigo "el coronavirus", el arma "las vacunas" y la estrategia "el mando", y cuando digo mando me refiero al poder científico, económico y .político que mueven los instrumentos necesarios para generar tranquilidad.

Permitidme que compare esta pandemia a una guerra y que utilice términos bélicos para describir la situación a día de hoy.

El parte de guerra es el siguiente:

Tenemos al enemigo acorralado, estamos cogiendo posiciones para dar el ataque definitivo, aunque los servicios secretos nos informan que coronavirus camuflados, "variantes", han sobrepasado las líneas defensivas en algunas zonas, Reino Unido, Sudáfrica, Brasil y algunos estados de EEUU.

Nuestro ejército, la población, está y debe seguir utilizando las medidas de protección (mascarillas, limitación de movilidad e higiene personal y del entorno), y se está dotando de protección con la vacuna que se está distribuyendo de forma distinta pero continua en los diferentes territorios.

El mando está dirigiendo los esfuerzos por fabricar vacunas con diferentes mecanismos de acción y componentes con la mayor celeridad posible y garantías de eficacia y seguridad. Igualmente, está dotando de mínimos suministros (ERTES, ayudas a autónomos, etc.) a la población para que mantenga las medidas de protección y sobreviva mientras dure esta fase de la guerra. Así mismo, el Centro de Control de la Guerra, donde los representantes de los diferentes países se reúnen y establecen estrategias para negociar, acordar y estimular a la industria a que fabrique con celeridad las diferentes vacunas, con la finalidad de dotar lo antes posible a la población de un arma eficaz contra este virus y liman diferencias para conseguir una unidad de acción.

A día de hoy, cómo van estos acuerdos y qué se puede esperar. Tenemos en plena distribución en nuestro ejército (población española) las vacunas de los laboratorios de Pfizer, Moderna y Astra-Zeneca, cuyo mecanismo de acción está basado en aportar material genético (ARNm) de coronavirus capaz de generar la proteína S de la cubierta de este virus y hacer que el sistema inmune produzca anticuerpos. Próximamente, se aprobará la vacuna del laboratorio de Johnson & Johnson, que utiliza para producir anticuerpos a un vector viral (adenovirus), que induce la producción de la proteína S en las células infectadas, siendo esta vacuna un recurso muy importante, porque su eficacia alta 66%, aunque, parece ser menor que las anteriores, se logra solo con una dosis.

En un futuro no muy lejano, además de que aparezcan otras vacunas, digamos del bloque occidental, entre ellas las españolas, veremos ampliado los recursos de vacunas con las vacunas de Rusia "Sputnik-V", cuyo mecanismo de acción es la producción de ésta mediante un adenovirus modificado y la vacuna de China "Sinopharm", cuyo mecanismo de acción es mediante virus inactivados y que no necesitan almacenarse a bajas temperaturas.

Por último, las estrategias de comunicación, para mantener la moral de la tropa alta y que no se pierda el espíritu de victoria, hace que el mensaje común de gobiernos, científicos y empresarios sea "Ya están aquí las vacunas, está cerca la victoria, todo volverá a la normalidad", haciendo cábalas y augurios de nuestro futuro. Esperemos que acierten.

Posiblemente, muchos no compartiréis mi relato de la realidad, espero no haber ofendido con esta parodia.

Este corresponsal se despide hasta el próximo parte de guerra, que será el último, si no caemos en la batalla de esta pandemia o de otra de las muchas de la vida.

Salud, Suerte y Optimismo